Encuentro agroecológico conectó a barrios de Ñuble
En el marco del programa Quiero Mi Barrio, Rucapequén de Chillán Viejo y Parque Estadio de Yungay realizaron una jornada de agroecología en el sector Pangal del Laja.
El encuentro impulsó técnicas agrícolas sostenibles como la diversificación de cultivos, la conservación de los recursos naturales, la soberanía alimentaria, la cosecha de vegetales saludables y el rescate de semillas locales.
“Por lo general se asocia nuestro ministerio a las viviendas, pero también tenemos un área social que fortalece a la comunidad y sus dirigentes, así trabajar juntos por lo que es justo y en esa búsqueda de justicia no se puede ignorar al medioambiente. Es simple, no hay sociedad sin naturaleza, eso es lo que se aprende y pone en práctica cuando nos conectamos con la tierra. Por lo mismo, este encuentro nos deja una sensación muy positiva y esperamos replicarlo a futuro con más organizaciones”, comentó Antonio Marchant, Seremi de Vivienda y Urbanismo.
La monitora medioambiental, Daniela Chavarría, comentó que la agroecología implica el intercambio de experiencias, tal como pasó con las vecinas y vecinos de Yungay y Chillán Viejo, “hay algo que los une, que es cultivar la vida, ese cultivar les permite un buen vivir, porque un huerto te enseña que cuidar es sinónimo de cuidarse, además tener mayor conciencia de la tierra y el agua nos permite entender y respetar los ciclos de la naturaleza, lo que se puede usar a favor de nuestras siembras”.
“Maravilloso el compartir, me llevo nuevas experiencias y aprendizajes de este paseo, las técnicas de cultivo fueron muy prácticas y nos ayudarán a tener plantas más saludables, también a rescatar la flora nativa”, comentó Julia Salcedo de Rucapequén. Por el lado de Yungay, Mario Silva señaló que la actividad “fue muy educativa, hay cosas que no tenía idea como hacer, por ejemplo, un almácigo o en qué momento se tienen que aplicar los insumos, en qué mes uno puede plantar.
Todas esas cosas son muy valiosas para una persona en esta edad”. Alrededor de 40 personas participaron en el encuentro de barrios ñublensinos, en su mayoría mujeres y adultos mayores. La jornada sirvió como terapia hortícola, además rescató el conocimiento ancestral de agricultores familiares de comunidades indígenas y campesinas, pues el foco estuvo en el cultivo responsable, la restauración ecológica, el manejo de plagas a través de remedios naturales, el uso eficiente del agua y evitar la erosión del suelo.